








Nuestras trufas
¿Qué son las trufas?
Las trufas son hongos comestibles pertenecientes al género Tuber. Estos hongos en forma natural viven en simbiosis (beneficio mutuo) en las raíces de determinadas especies de árboles forestales y arbustos, y por ende, las trufas crecen y maduran bajo la superficie del suelo, normalmente entre 10-15 cm, aunque en algunas ocasiones pueden encontrarse hasta 35 cms. e incluso emerger levemente en la superficie del suelo.
¿Qué variedades hay en Chile?
Actualmente, la principal trufa cultivada en Chile es la Trufa Negra (Tuber melanosporum), la cual se forma en primavera a partir del micelio del hongo y ésta crece durante los meses de verano, para finalmente madurar durante el invierno (fines de Mayo a comienzo de Septiembre). Otras dos variedades de trufas comestibles están siendo cultivadas en el país, trufa de verano (Tuber aestivum) y trufa blanca (Tuber borchii) con algunos huertos en el país y en sus etapas iniciales de desarrollo.
¿Cómo distinguir su calidad?
Una trufa madura se distingue principalmente por tres cualidades: Aroma potente y agradable, textura firme y color interior. (gleba) negro con venas blancas
Cultivo de trufas en Chile
Aspectos importantes que queremos compartir con ustedes.
Esencial para comenzar. Marca la frontera donde es posible desarrollar un proyecto trufero. Una vez establecida una plantación trufera, corregir aspectos en el suelo que no son apropiados para el cultivo es poco eficaz y elevan sustancialmente los costos. Requiere clima mediterráneo y disponibilidad de agua para riego.
Un suelo trufero debe ser tener siguientes condiciones iniciales:
– Baja o relativamente baja fertilidad.
– Suelos friables y bien aireados. Franco, franco arenoso, franco limoso.
– Historial del lugar sin bosques ni cultivos intensivos.
– Topografía adecuada para una plantación de árboles. Que impida apozamiento de agua.
Un clima mediterráneo es requerido y en la mayoría de los casos se necesita realizar importante enmienda con cal para alcanzar un pH 7,5-8,5, condición esencial para el cultivo de la trufa negra.
Plantas Micorrizadas
La planta es la incubadora productiva, también es esencial para comenzar bien. Es primordial una planta de calidad. Obtener las plantas de viveros especializados, confiables y con experiencia, no arriesgar un proyecto de largo aliento y con una importante inversión, en buscar plantas sin certificación acreditada o producidas en forma artesanal.
Existen varias condiciones claves que deben cumplirse para el establecimiento y desarrollo exitoso de una plantación de trufas, dentro de ellas se consideran un pH entre 7,5 – 8,5, suelos granulosos, humedad suficiente del suelo en periodos claves durante el periodo estival, mínima presencia de hongos competidores, control de maleza y poda particular para el cultivo.
Itinerario Cultural
Saber cómo manejar mi plantación en las diferentes etapas del cultivo. Cada plantación es única, y por ello la aplicación de prácticas culturales se adecuan a cada caso.
En general el cultivo tiene cuatro etapas: a) establecimiento; b) pre-producción; c) producción; d) renovación.
Control y Seguimiento
Saber, mediante técnicas de muestreo, si el establecimiento y desarrollo del huerto va cumpliendo adecuadamente con las etapas de pre y fructificación y que los factores esenciales del suelo, raíces y estado sanitario y nutricional de la planta están correctos.
Para cosechar trufas maduras, se requiere de prácticas muy particulares basados en el uso de perros que pueden detectar su aroma desde mayores distancias y a mayor profundidad que los humanos. Actualmente, la forma de cosecha más adecuada es con el uso de perros especialmente adiestrados.
Una trufa puede durar en condición de fresco máximo 10 días en condiciones de refrigeración y embalaje adecuado.
DESCARGAR FICHA TÉCNICA
La producción de trufa negra en Europa presenta una marcada estacionalidad, y el producto fresco es comercializado entre los meses de diciembre a marzo. En nuestro país, una de las principales ventajas comerciales es producir trufas en contra temporada, accediendo a mercados de gran consumo cuando los principales países productores (Francia, España e Italia) no disponen de este hongo fresco.
El mercado nacional, aún está en una etapa incipiente, consumiendo alrededor del 10% de la producción.
Los perros truferos

En el cultivo de trufas el perro trufero es un eslabón esencial. Es el «cazador de trufas» por excelencia. Es un can especialmente entrenado para buscar las trufas que están bajo tierra solo detectando su aroma cuando éstas están maduras. En general cualquier perro tiene la capacidad olfativa para captar el aroma de las trufas, pero no todos prestan condiciones aceptables para ser utilizados como perros truferos.
El carácter obediente es esencial y sus condiciones físicas deben satisfacer necesidades que permitan recorrer la trufera por un periodo relativamente extenso, y no menor, trabajar en pleno invierno. En Chile se utilizan Labradores, Border Collie, Fox Terrier, Perro de Agua Español, Policial, Beagle, Braco, y mestizos.

Gestión de suelo
Labores de suelo que permitan la expansión radicular progresiva y evitar la compactación.
Gestión de humedad
Incluye administración de riego y técnicas de conservación de humedad en el suelo en época de deficiencia hídrica.

Conservación de calidad
Una vez cosechada, la trufa fresca debe ser conservada en condiciones frías entre 1 y 4 grados celsius y baja humedad.
Mantención de parámetros esenciales
Evitar la desvalorización de parámetros requeridos para el cultivo, entre ellos, el pH.
Control de plagas y competidores
Gestión oportuna para controlar plagas y malezas, que afectan la sanidad del árbol y calidad de las trufas.